¿Sabías que no es necesario pinzar el cordón umbilical nada más nacer? ¿Conoces los beneficios de esperar unos minutos antes de pinzarlo?
Pinzar el cordón umbilical nada más nacer
¿Sí o no?
El pinzamiento del cordón umbilical ha sido un motivo de debate y grandes controversias desde tiempos de Aristóteles.
Hay culturas que consideran la placenta como algo sagrado para el bebé que no debe pinzarse ni cortarse hasta que se desprenda por sí misma.
Otras culturas la consideran una gran fuente de energía para ese bebé y dejan que deje de latir el cordón para poder cortarlo y hay otras culturas que realizan un pinzamiento inmediato del cordón umbilical nada más nacer el bebé.
¿Cuándo se considera pinzamiento temprano del cordón y cuándo pinzamiento tardío?
PINZAR EL CORDÓN DE FORMA TEMPRANA O NADA MÁS NACER
Si el cordón umbilical es pinzado o cortado inmediatamente nada más nacer el bebé o antes del primer minuto de vida, se considera pinzamiento temprano.
PINZAR EL CORDÓN DE FORMA TARDÍA
Por el contrario, se considera pinzamiento tardío del cordón cuando han pasado más de 3 minutos del nacimiento o hasta que el cordón deja de latir, lo cual puede durar entre 3 y 20 minutos.
¿Qué se hace en nuestro país?
Pues en España, en la mayoría de hospitales, aunque cada vez están cambiando más las cosas, el pinzamiento del cordón umbilical se hace inmediatamente nada más nacer el bebé.
De hecho es relativamente frecuente, oír testimonios en los medios de comunicación, donde se han asistido partos inesperados en la calle o en el coche o incluso en la puerta de un hospital y lo primero que menciona la noticia es que la persona “anudó” el cordón umbilical de inmediato con algo que tenía a mano.
¿Qué recomiendan los organismos oficiales?
La OMS recomienda:
El pinzamiento tardío del cordón umbilical al menos entre 1 y 3 minutos después del parto.
La guía de atención al parto normal del Ministerio de Sanidad, recomienda:
Esperar al menos 2 minutos para su pinzamiento.
¿Por qué, hasta hace unos años, supuestamente era necesario pinzar el cordón de forma inmediata?
Ictericia (coloración amarillenta en la piel y mucosas del bebé)
Los estudios demuestran que el riesgo de ictericia no es mayor o es muy levemente mayor para los bebés con pinzamiento tardío del cordón.
No se ha demostrado más riesgo de ictericia grave.
Policitemia (aumento de la viscosidad de la sangre, por aumento de eritrocitos)
Es biológicamente imposible que un bebé reciba demasiada sangre a través del cordón por dejarle sin pinzar hasta que deje de latir, ya que es algo completamente fisiológico.
Los estudios no revelan un mayor riesgo de policitemia.
¿Por qué es mejor esperar? ¿Qué sentido tiene?
La función del cordón umbilical antes de nacer
Antes de nacer el bebé, dentro del útero, respira y realiza la mayoría de sus funciones a través de la placenta y el cordón umbilical.
Básicamente el cordón y la placenta respiran para el bebé, es su corazón, su sistema digestivo, su riñón y sus pulmones.
El cordón umbilical tras el nacimiento
Cuando el bebé nace, sus pulmones, que hasta ese momento estaban llenos de líquido, van llenándose de aire y preparándose para respirar. De la misma forma, el corazón comienza a cambiar su circulación y se prepara para la circulación que va a acompañar al bebé toda su vida.
Nada más nacer, el cordón umbilical está preparado para seguir latiendo durante un tiempo, hasta 20 minutos o más y no se cierra hasta que los pulmones del bebé funcionan perfectamente por si solos y hasta que su cerebro se ha asegurado la cantidad de oxígeno necesario.
Es decir, durante millones de años, los seres humanos y el resto de los mamíferos, hemos desarrollado un mecanismo muy seguro para que al nacer se cierren los cordones umbilicales sin llegar a interrumpir nuestra respiración y asegurando nuestra supervivencia.
En resumen:
- El cordón umbilical sigue latiendo y mandando oxígeno al bebé hasta 20 minutos después de nacer.
- Ese oxígeno y esa sangre aseguran menos anemias posteriores y menos problemas si por lo que sea los pulmones tardan más en empezar a mandar oxígeno al resto del cuerpo y el cerebro.
